A finales del año pasado su imagen "Phantom" fue vendida a un comprador anónimo por 6,5 millones de dólares
El fotógrafo más famoso, deseado y premiado del mundo. Así se describe a sí mismo Peter Lik, que tras firmar la que pasa por ser la fotografía más cara de la historia a día de hoy, está claro que no ha hecho de la modestia una de sus virtudes. Y es que las cifras que maneja este autor afincado en Las Vegas y con un estudio de más de 9.000 metros cuadrados dedicado a la producción de copias no son nada terrenales.
Según publicaba recientemente The New York Times, Lik presume de haber vendido 100.000 fotografías por un valor de 440 millones de dólares (casi 390 millones de euros) a lo largo del año pasado. Solo por su famosa foto "Phantom" obtuvo en diciembre 6,5 millones de dólares, convirtiéndose así en la foto más cara de la historia hasta el momento.
En el citado reportaje de The New York Times que recogen en PetaPixel, además de abordar las complicadas relaciones de los fotógrafos con los circuitos tradicionales del coleccionismo, también se pone sobre la mesa un detalle a tener en cuenta: a diferencia de lo ocurrido con otras de las fotografías más caras de la historia vendidas en forma de subasta pública, en el caso de Peter Lik se trata generalmente de ventas particulares y de un comprador anónimo, con lo que, más allá de la publicidad que el autor ofrece sobre la venta, resultaría complicado corroborar esas cifras
Así, y siempre según Lik, "Phantom" fue vendida a un seguidor de su obra que desembolsó otros 3,5 millones de dólares en la misma operación para hacerse con otras dos de sus fotografías.
Australiano con pasaporte estadounidense, la carrera comercial de Peter Lik se remonta a 1996 cuando fundó una empresa dedicada a la venta de postales con sus fotografías. Sin embargo, fue en 2005 cuando dio el paso decisivo para orientar su negocio, abriendo una galería de venta de fotos en el hotel Caesar's Palace de Las Vegas. Según explica, cada una de sus fotos se mueve en una tirada limitada de 995 copias, con un precio de salida de 4.000 dólares por fotografía que va aumentando según se van agotando.
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