Destrucción en una ciudad de Perú por las torrenciales lluvias

Este domingo decidí visitar el cantón de Gualaceo, un lugar que tiene muchos encantos para pasarlo bien, salí con mi hija de 7 años, pero antes de entrar al terminal terrestre de Cuenca, decidimos comer algo en los puestos que están en la parte lateral del terminal, en donde nos llevamos una mala experiencia, en el puesto que decidimos comer pedimos un encebollado y un jugo de coco, del cual nos dieron con pescado dañado y un jugo caliente, le reclamamos al dueño del local,quien nos dijo que recién hervía la leche por lo que el jugo esta caliente y que el encebollado estaba bien, que igual tenia que pagar.

Para no discutir y dañarnos el paseo, decidí pagar y retirarme, al interior del terminal, no tenia sueltos para pagar los 10 centavos para el torniquete, por lo que le compre a mi hija una golosina, unos arroces de colores, de un valor de 50 centavos, ya en el bus probamos el arroz y estaba agrio por lo que decidimos votarlo.

Después de unos minutos paso por los asientos el chofer de la linea Ruta Gualaceo, quien me dijo de una manera amenazadora que debo de pagar 80 centavos por el puesto que estaba ocupando mi hija, a lo cual reclame que es menor de edad que debería de pagar la mitad de pasaje, y me contesto que si deseaba pagar la mitad del pasaje que le amarque y que no ocupe el lugar.

En el trayecto del viaje subieron; dos cantantes, una señora vendiendo periódicos, otra vendiendo bolos, un joven vendiendo caramelos, un señor vendiendo chicles, otra señora vendiendo helados, y un señor vendiendo cocadas, quien decía " cocadas con pura leche para que te arreches"

En el bus, de placas terminadas 149 ,subió tanta gente que un señor que estaba parado tuvo que arrimarse donde un joven que estaba sentado el cual le reclamo que estaba metiéndole el codo en el rostro, y esta persona de una forma mal educada le dijo " si quieres irte cómodo andate en taxi pues"

De regreso la historia fue diferente, compre los pasajes en el terminad de Gualaceo, me cobraron 80ctvos por mi y 40ctvos por mi hija, vieron que todos estén sentados, cerraron las puertas, no dejaron subir a ningún vendedor, y llevaron un control de seguridad que nadie vaya parado en todo el trayecto.

Esta mala experiencia lo viví como un cuencano, un ciudadano que decidió viajar a conocer uno de los cantones de la Provincia, una persona que tomo la mala decisión de ir en transporte publico, que pensó que las cosas ya habían cambiado, quien pensó que las autoridades estaban trabajando por una Provincia turística.

Porque turismo no es solo lugares con buenos parques y lindas fachadas, turismo va englobado desde el momento que uno desea visitar un lugar.

Quedan muchas incógnitas en el aire, preguntas que todos los ciudadanos nos hacemos:

¡¿Quien controla la calidad de la comida que se vende en el terminal?
¡¿Quien controla que no se vendan cosas caducadas ?
¡¿Porque se deja subir a tantos vendedores en los buses?
¡¿Porque se permite que un bus viaje con tanta gente?
¡¿Porque no se respeta el derecho de medio pasaje ?
¡¿Porque los buses cogen y dejan pasajeros en donde se les ocurra?
¡¿Porque no se puede respetar al viajero con normativas como se lo hace en el terminal de Gualaceo?

Espero que esta opinión llegue a oídos de las autoridades, al Alcalde Marcelo Cabrera, al Gobernador Juan Cristóbal Lloret, que no permita que mas personas se lleven una mala experiencia de la transportación Provincial y de comprar cosas dañadas.